domingo, 18 de mayo de 2008

Carta sin sellos...

Querido Tú,

¿Cómo estás? Espero que bien. Bueno, te explico el motivo de esta carta sin sellos. Estuve pensando mucho que hacer, si escribirtela o no, si decirtelo en persona o no, si ignorar la situación simplemente asesorada por la mayoría o no… qué sería lo más maduro o qué sería lo mejor… y al final me he decidido por escribirte esta carta porque ya sabes que yo soy así. Me da igual lo que piensen los demás. Quiero que sepas lo que pienso pero tampoco quiero agobiarte con una conversación a la cara… y espero que esta carta no te agobie ni nada por el estilo.

Quizás a estas alturas, yo no soy quien para decirte estas cosas, quizás cuando termines de leer todo esto pienses que no tengo derecho a pensar así…

Primero, no se si se ha dado el caso, pero si te he hecho daño, lo siento, lo siento mucho de verdad… no ha sido mi intención. Te puedes imaginar por la situación en concreto que te digo esto ¿verdad? Porque antes de eso, yo creo que no te he hecho daño nunca. Si me equivoco y aquella situación que provoqué con aquel muchacho no te hizo daño, pues dímelo y así me siento un poco mejor. También te digo esto, porque por mi parte, a mi si me dolió, y bastante, aquel día en que me enteré de lo de aquella chica (creo que no hace falta que de más detalles de nada ¿no?)... si me dolió a mi esto, he pensado que a ti también te dolería lo que yo hice. Si esto te ha podido molestar, dilo, sin más. Y que bueno, que hice lo que me dio la gana, que puede que me equivocara, y que ahora tengo que aguantarme con esas consecuencias.

Segundo, en la vida se cometen muchos errores, y yo creo que últimamente la he cagado mucho. En concreto, con lo “nuestro”. Pienso que no he sido yo misma, que me he reprimido mucho por no cagarla, y mira dónde estamos. A lo mejor tú tienes otro punto de vista de esto. Pero bueno, la culpa no sólo ha sido mía... me habría gustado que me dijeras lo que sentías y pensabas de vez en cuando, sobre todo al principio. Tu manera de ver las cosas. Sólo me lo dijiste al final, y cuando todo era un poco mierda ya. ¿Tú sabes por qué se jodió todo? Porque yo no lo tengo nada claro… Pero bueno, pensarás que para que darle más vueltas... simplemente es que me jode que la cosa haya acabado así porque no es lo que yo quería, sólo eso.

Sólo quiero ser feliz, y me he dado cuenta de que no he luchado por ello, simplemente me he dejado llevar, por lo que me dicen, por lo que dicen que es mejor para mí, por lo que debería hacer… y dejé de luchar. Y me he dado cuenta tarde. Prefiero hacer lo que yo pienso y seguir mis impulsos, y si me equivoco, pues ya está, pero ha sido decisión mía. Seré como sea, una pesada, un poco zumbada, pero cuando quiero algo, lucho por ello y no me rindo, voy a pasar ya de rendirme… que llevo así mucho tiempo. No me da la gana seguir así.

No soy feliz si seguimos así de raros, ni viendo que no te da la gana de estar con nosotros como antes, que eso ya no es sólo por mí sino por toda la gente que nos rodea… te digo que yo soy totalmente capaz de volver a la situación de antes. Me gustaría que se arreglaran las cosas. No más daño, ¿vale?

Un saludo...

xxx

No hay comentarios: